Netflix ha acordado adquirir los estudios de televisión, cine y la división de streaming de Warner Bros Discovery por 72.000 millones de dólares. La operación, aprobada por los consejos de ambas compañías, transfiere al gigante del streaming franquicias como Game of Thrones, Harry Potter y DC Comics, y redefine el equilibrio de poder en Hollywood.
La compra llega tras una competencia intensa. Netflix ofreció cerca de 28 dólares por acción, superando a Paramount Skydance y Comcast. El acuerdo valora Warner Bros Discovery en 27,75 dólares por acción (una prima superior al 120% respecto a septiembre) y sitúa el valor empresarial en 82.700 millones al incluir la deuda. Los accionistas recibirán 23,25 dólares en efectivo y unos 4,50 dólares en acciones de Netflix por título.
La compañía prevé ampliar su producción en EE.UU., aumentar su inversión en contenido original y lograr entre 2.000 y 3.000 millones de dólares en ahorros anuales desde el tercer año. También asegura que mantendrá los estrenos de Warner en cines para evitar una reducción en la oferta teatral.
El acuerdo bajo presión regulatoria
La operación afronta un escrutinio fuerte en EE.UU. y Europa. La unión del mayor servicio de streaming del mundo con el propietario de HBO Max, con cerca de 130 millones de suscriptores, ha generado alertas sobre concentración de mercado. Organizaciones del sector y analistas temen menos competencia, precios más altos y una caída del volumen de producciones.
Paramount, que cuestionó el proceso de venta, y Comcast no han comentado el resultado. CNBC informó de que Paramount llegó a ofrecer 30 dólares por acción, aunque la cifra no ha podido verificarse.
Consecuencias para el mercado
Algunos analistas apuntan a que la fusión podría fortalecer la estrategia de Netflix en áreas como los videojuegos, donde Warner Bros ha conseguido éxitos como Hogwarts Legacy. Otros advierten del impacto en cines y empleo creativo: Cinema United habla de una “amenaza sin precedentes”, y antiguos directivos de Warner alertan de una reducción de competencia. Para los consumidores, expertos como Tom Harrington prevén precios más altos y una oferta más limitada.
El cierre del acuerdo depende de la escisión de la unidad global de redes de Warner Bros Discovery, prevista para el tercer trimestre de 2026. Netflix ha ofrecido una cláusula de ruptura de 5.800 millones de dólares, mientras que Warner pagaría 2.800 millones si el pacto se deshace.
Si supera el examen regulatorio, la operación se convertirá en una de las mayores transformaciones de la industria audiovisual en décadas y situará a Netflix como el principal conglomerado del entretenimiento global.
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